Rishikesh: el pakora que me mató. The pakora that killed me. [05.10.2010-11.10.2010]

Vegeta & Pedro. De camino. On the road.
Helen y Vegeta se bañan estilo indio: con toda la ropa. Helen and Vegeta took a bath in indian style: with all their clothes on.
Una de las cataratas pequeñas de camino hacia la grande. One of the small ones on the road to the big one.



Nos encontramos en la catarata con un baba en levitación. We ran into a levitating baba in the waterfall.
El baba no estaba solo, tenía un amigo tan tonto como él. The baba wasn't alone, he had a friend as silly as him.
Hombre aburrido en Rishikesh, frente al Ganges. Bored guy in Rishikesh, in front of the Ganges.

A ningún dios que se precie le gusta la arrogancia en el hombre. Y menos si ésta viene relacionada con atribuirse características exclusivas suyas. Aunque los hindúes no sean tan celosos y no sé si Yavhé  (que mejoró la mala leche tras ser papá) tiene jurisdicción en este lado del mundo, el declararme indestructible ha desencadenado el proceso inverso. Tras el post tuve una otitis. Una semana más tarde un resfriado. Y no había terminado esta fiesta germinal cuando me comí aquel pakora (verdura mezclada con masa y frita). A las horas tuve que hacerlo salir a la fuerza y los 5 días posteriores los he pasado de viaje de la cama al baño. Este ha sido mi descanso y aprentizaje de yoga en Rishikesh.
Por lo menos, entre el pakora y la enfermedad tuve tiempo de visitar las catarátas con Hellen (Korea) que me acompañaba desde Delhi, y Pedro (Brazil) y Vijayta (India) que conocimos en el bus.
Se me quedaron los ojos como platos, literalmente, cuando conocí a Vijayta (“¿¿¿Te llamas VEGETA????”). Esto después de descubrir que sal en hindi se dice Namek. Como pronunciación de Vijayta (Vidyeta) y Vegeta (Vedyita) cambia un poco, decidí llamarla siempre Vegeta. Vegeta es un personaje de unos dibujos animados.
Subimos más allá del camino para ver si encontrábamos más cataratas por el mismo precio (0,30Rs o 0,50€ y andar 20 minutos o media hora). Sólo encontramos una campesina que nos dijo que no había nada. Vajayta le preguntó si podía darnos de comer y dijo que claro aunque le dio vergüenza cuando le preguntamos por cuanto. Al final le dimos cada uno 50 Rs cada uno por el plato de arroz y dhal (lentejas), ambos cosechados en sus campos.

PS: Mamie, oui ça va, ne t’en fait pas.


No proper God likes arrogancy in human beings. And much less if it involves taking their exclusive attributtes as one‘s own. The hindu’s are not that jaleous and I don’t know if Yavhe (who improved his bad attitude after being father) has jurisdiction in this part of the world,but declaring myself indestructible has triggered the oposite process. After the post I had an ear infection. A week later I had a cold. And this germ party not being over I ate this pakora (deep fried vegetables mixed with batter). Few hours later I had to force it to go out and then stayed for 5 days travelling from my bed to the toilets. This has been my rest and my yoga learning in Rishikesh.
At least, between the pakora and the sickness I had enough time to visit Rishikesh waterfalls with Hellen (Korea), who was coming with me from Delhi, and Pedro (Brazil) and Vijayta (India), who we met on the bus.
My eyes were wide open when I met Vijayta ("Your name is VEGETA???"). This was soon after learning that salt is hindi is Namek. Since the name wasn’t exactly the same (Vijayta is ‘Veejehta’), I called her from then on Vegeta. Vegeta is a character in some cartoon series.
We went up more out of the path to see if we would find more waterfalls for the same price (0,50€ and 20 mins or half an hour of walk). We only found a peasant who told us there was nothing further on. Vajayta asked her if she could feed us and she agreed, however she felt shy when we asked how much should we give. We finally gave 50 Rs each for a dish of rice and dhal (lentils), both harvested in the surrounding fields.

2 comentarios:

toro dijo...

Feliz cumple, indestructible.

Sergio Webo dijo...

Feliz semen hindu! Menudos modales, comiendo con la mano.

Publicar un comentario